Mañana.

Curiosamente el punto principal quisiera alejarlo de la publicidad de un evento, y centrarlo en un experimento. El nacimiento implica un antes, durante y después. Casi cualquier hecho implica esto, partiendo de la teoría del Caos todo tiene causa (antes) y efecto (después) y la ejecución del hecho (durante).

Hoy:

Expectativas... la niña está pateando y moviéndose dentro del líquido, flotando. ¿Me recibirán? Soy una niña ¿me aceptarán? ¿lo esperaban?

Quizás si me oculto, al menos pueda tener el factor sorpresa a mi lado. No me conocen, si no me quieren será porque no me conocen, no porque sea mala.

Quiero salir. Espero no molestar, pero realmente quiero salir, ya es hora. Por favor, déjame salir. Si sigo así moriré (miedo...).

Pues si podré salir... porque no hay más opción que salir. Tengo que salir, necesito salir, no hay discusión, voy a salir. No haré nada malo, es lo que hacen los bebés... nacen. Prometo portarme bien. En realidad, no sé si me porte bien, igual saldré.

Estaré ahí igual, aún te necesito tanto como tú a mí. Estaré a tu lado. Confía en mí, que soy producto de tu cuerpo. Estaré a tu lado cuando salga.

¿Habrá gente esperándome? ¿Estarán todos cuando salga? Por fin, los volveré a ver....

Me cuentan de los regalos que me esperan, cuando uno nace le dan regalos. La vida es un regalo. Todo parece quedar bajo la sorpresa. No me gustan las sorpresas. Hay demasiadas expectativas alrededor de ellas. ¿Y si no me gusta? ¿Y si me gusta pero no lo notan? ¿Y si no les gusta mi sorpresa?

Este es un sitio muy controlado. Seguro. Pequeño.

Debe ser como volar. Libre, libertad. Amplitud. Respirar...

Mañana.

“There is, Oh Monks, a not-born, a not-become, a not-made, a not-compounded. Monks, if that unborn, not-become, not-made, not-compounded were not, there would be no escape from this here that is born, become, made and compounded.”

(Hindu Prince Gautama Siddharta, the founder of Buddhism, 563-483 B.C.)

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