viernes, 5 de agosto de 2005

La rutina

He luchado contra muchas necesidades, ideas y deseos esta semana, y la verdad después de todos estos días no se ya diferenciar entre ellos.

No puedo cerrar llagas, no puedo dejar estos sentimientos que molestan, que cruzan entre las paredes, todo sigue revuelto, el gran desastre que no ha tornado a la normalidad, porque ya olvidé lo que pudiera parecerse a algo "normal". En realidad, nunca lo he conocido, sólo he sido espectadora y crédula.

No eres tú, no soy yo, es TODO, TODOS, uno a uno pasean, y no sé cual camino tomar. Sin embargo, sé de varias cosas que quiero, y deseo, y no por eso me siento más aliviada.

Sigo cansada, inconforme, ambiciosa, y el talón sigue al aire...

¿Es tanto lo que se pide? ¿Acaso no hay bastante que dar a cambio? Nada es gratis, pero entonces por qué cuando se recibe a cambio de dar un poco, no vale lo mismo que dar y dar y dar sin recibir, ¿por qué se busca más alguien que no nos dé?, ¿por qué siempre creemos que podemos salvar a quién no quiere ser salvado? Al final es cuestión de creer en algo que nos acomode y luchar por él, ahora bien, cuidado con lo la bandera que tomes...

Hay muchas formas de golpear, muchas maneras de ser, de aparentar, y peligrosamente, hacer creer. He ahí el truco, el velo que se pone, el perfume que disimula lo putrefacto, el brillo que cubre lo opaco del alma. Y es tentador, romper las "reglas", jugar... Pero ¿qué se gana? Él que rompió todo, no pagará nada, él que me mató no me va revivir, el que se llevó lo preciado, no lo va regresar porque ni sabe lo que tuvo. Entonces, sólo sigamos contagiando al resto que comete el error de creer en tí o en algo, para que siga la gran cadena de sangre. Eso me parece muy estúpidamente "justo"

Un momento, además ¿quiere decir que uno debe quedarse con la rabia, la frustración y los pedazos que te dejaron? Porque a todas estas, ¿quién se hace responsable? tú y sólo tú has quedado a cargo de ti mismo pero él que lo ha vivido sabe que no hay nada mejor que tener un apoyo cerca para poder salir adelante. Una mano, un abrazo, un simple "Aquí estoy". ¿ES MUCHO?

Sí, es demasiado, para el que lo recibe es el cielo, pero para el que lo da es...perder demasiado, dar demasiado...que miedo!!!! jajajajaja increíble, pero he llegado a esa conclusión, es demasiado. Lo que has estado dando, lo que pensabas que era como el aire, gratis, tácito e imprescindible, vital...resulta que no es más que mercancía que tienes que negociar, ser ávaro y mezquino, y más aún, buscar tener siempre más pero sin dar nada a cambio.

Toda esta grandisima PAJA que he dicho, es bastante radical, es bastante agria, y no cambia en NADA, absolutamente en NADA la forma en como funcionan las cosas, la gran basura que hay afuera (salvando las contadísimas excepciones). ¿Por qué la escribo? Porque quiero confirmar que no hay nadie, NADIE que me pueda demostrar lo contrario, SIIIII, con todo lo pedante y prepotente que suena, es sólo un reto, tomélo el que pueda...

PD: A mis contadísimas excepciones, les pido disculpas, después de todo ya me conocen.

"The prince is never going to come, everybody knows that; and maybe Sleeping Beauty's dead"
(Lestat, The Queen Of The Damned)
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