miércoles, 28 de abril de 2010

La Hora Zen: En el Precipicio


Foto:  Meditation Two Monks por h.koppdelaney, en Flickr.

"Un hombre está colgado sobre el abismo sujetándose con los dientes a la rama de un árbol. Tiene los pies en el vacío y sus manos no pueden agarrarse a ningún sitio.

Supongamos que otro hombre le hace esta pregunta:
-  ¿Qué significa la venida del Bodhidharma?

Si este abre la boca para responder, caerá al abismo y perderá la vida. Pero si no responde no presta ninguna atención al que le pregunta.

En este momento crítico ¿qué debe hacer?."

(Introducción al Budismo, Antolín y Embid)

El instinto dice que debe preservar su vida y no responder, es fácil.

Pero entonces no sería un koan lo que hemos leído. ¿Cómo funciona esto?

En el libro Introducción al Budismo Zen (Antolín, Embid) se explica lo indicado por Huang Po Chan para practicar este ejercicio. Debes entregarte al koan, día y noche tenerlo en mente, tus pensamientos fijos en el koan. Tai Hui comentaba que tras concentrarte en un koan intensamente, lo encontrarás soso, sin ningún sentido, luego sentirás alegría y una gran inquietud. Debes continuar, sin prestar mayor atención a las emociones que vas sintiendo, hasta llegar a un callejón sin salida. Luego, al abandonar toda conciencia y pensamiento, ocurre una explosión en la cabeza y encontramos la verdad del koan, y que estuvo allí desde el inicio.

Suena a todo un lío. Meditar sobre un koan es meditar sobre el Universo, que es como el Gran Koan para el Zen. Y al entender uno, entendemos todos, entendemos un koan y entendemos al Universo.

Pero basta con solo pensar y pensar en algo para resolverlo? Solo veo una forma y es probando.
Get This

1 comments:

Panta REI dijo...

Bienvenido siempre!

Me contenta que estés por estos caminos :)

Muy bueno tu blog, ya me apunté a seguirlo.

Veo que te interesa la filosofía oriental, de seguro tienes mucho que aportar con tus comentarios.

Espero verte seguido!